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lunes, 16 de abril de 2018

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MICER FRANCISCO IMPERIAL Y LA POESÍA LITÚRGICA DEL SIGLO XV.


 
 


 


“divino Apolo, a ti me encomiendo, ayúdame con tu sapiencia. Que en este sueño de escribir atiendo” Así comienza el “Decir de las siete virtudes” un poema alegórico, con muchas claves y que por su frescura recuerda esos dípticos de la pintura de los pequeños alemanes que enmarcan paisajes bucólicos e inocentes de la edad media… “en un florido prado do un rosal enflora”, con sus vírgenes lactantes, los ropajes principescos o los ángeles rubios que pinta como nadie Fra Angélico. Actualmente, una época donde se niega  la palabra y hasta son capaces de sacarte la pistola, ciertos críticos adocenados, cuando hay un verbo que no los suena o tienen que mirar en el diccionario un vocablo, convendría enfrascarse en la lectura de estos artistas de la palabra, para conjurar ciertos fantasmas y demonios familiares. La ramplonería y la vulgaridad se quiere que habiten entre nosotros. Esta inversión de las calidades lexicografitas y semánticas es una táctica de dominación a cargo de las fuerzas invisibles que tienen miedo a la palabra y en rebelión contra el axioma inexorable de in principio erat Verbum. El hecho es que este genovés que llegó a Almirante de Castilla y que dedica el poema aludido al nacimiento del rey don Juan II en Toro, hijo de la inglesa Catalina de Lancaster en 1404, casada con Juan I, discípulo del Dante ha sido uno de los poetas más estudiados por los hispanólogos. Su poesía oculta no pocos  secretos acerca de la mentalidad del Mester/mister/menester/maestrazgo de clerecía porque no era un autor de masas sino de elites.. Por ejemplo a través de Imperial se no tiene informados de las conmociones contra los usureros que se suceden una tras otra en motines populares tanto en Castilla como en Andalucía. La bestia yudearra, a su decir, es una sanguijuela himplada de odio y de desesperación. El quincento es el siglo de la alegoría, del símbolo. La lectura oculta, disfraza el sentido implícito o lo que se esconde detrás de una estrofa o de un verso. Francisco Imperial anuncia en sus versos que el nuevo rey de Castilla, aunque favorecedor de las artes y de los poetas, deparará desasido y en manos de validos sus reinos lo que redundará en el descontento de los súbditos, el hambre, la pobreza, la injusticia, el bandolerismo de los que haría responsable al alto clero y a los rabinos.


El reinado de este monarca concluye con una guerra con Portugal que derivaría en civil entre los secuaces de Isabel la Católica y la Beltraneja.


Asimismo, deja caer un aserto que cobra relieve en la actualidad pues dice que el fin del mundo no vendrá por la obcecación de Mahoma sino por la ideología fanática de los de Moisés que apoyarán al anticristo. Barajemos mensajeros y analicemos el trobar clus de este vate italo- provenzal. De su barajadura se podrán obtener en forma de acertijo las adivinaciones por una iglesia prevaricadora y una nobleza despiadada en la que se anuncia no sólo el fin del mundo sino la destrucción de las cristiandades por otro Judas. Sus versos recuerdan la riqueza de los camafeos cuajados de pedrería y broslados de seda de las viejas casullas. De vez en cuando invoca a la Madona (en latín, en castellano, en árabe y en inglés) oh mother of God, help… salve regina.. saha bici alhanina alquabila mora (a ti invoque piadosa la gente mora). Desde luego se trata de un texto difícil, plagado de recursos retóricos (epodos, modorres, poliptoton, exposiciones, extrapolaciones, repeticiones) muy trabajado siguiendo los consejos del pulido constante de los versos, según recordaba Horacio, limae labor et mora. La literatura ha de tomarse su tiempo y a veces ha de presentarse al lector en medio de velos de oscuridad como las vestales. Pues cuanto menos enseñas, más sugieres.  Los antiguos utilizaban una serie de recursos retóricos, hoy desaparecidos, que incentivan la importancia de la literatura oral y que convertían al arte literario en el primero de todas las bellas artes. Otra característica es la relación que tenía el arte poético medieval con la liturgia  cristiana grecolatina. Imperial en este largo poema dedicado al natalicio del rey  castellano sigue la estructura de la misa de pascua con su introito, su doxología, su epiclesía, su eucaristía y su eulogía, de la misa del Sábado de Gloria el novilunio de primavera cuando el sol está en Aries. Ya para los romanos tenían características sagradas los sobredichos movimientos lunares. El Racional de William Durandus, un cisterciense inglés que estudia la fecha de la fijación de la pascua cristiana y explica todos los cantos y lecciones de ese día, se basa en el ceremonial muzárabe al respecto y es el que sigue el poeta genovés, que escribe en castellano, para ensalzar el natalicio de Juan II.

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