INCONCEBIBLE UN MUNDO
SIN LIBROS
Toda mi vida desde
que se inició la gran persecución del fascio/sionista fue un ir y venir a la
cuesta Moyano de tras de la verja del botánico. Allí se encontraba lo más
diverso novelas, poesía, libros de historia y de filosofía. Mi casa es una
cárcel maravillosa de papel en la cual me refugio. Estoy viendo las venir
apostado en la tronera de mi pozo de tirador.
Ruidavets era el rey
del mambo. Los nuevos oscurantistas (tiran cantos contra su tejado) pasan `por
alto un hecho impepinable: España fue durante siglos junto con Rusia la
`primera potencia bibliográfica del mundo.
Planeta, Austral, Destino, Doncel, Edelvives,
Castalia y todas esas editoriales especializadas en el libro de bolsillo,
Molino, El Ciervo, con sede en Barcelona constituyeron el olimpo de las letras
hispanas y el mayor esplendor el auge supremo paradójicamente y mal que les
pese a todos estos trincones de nuestra política venal se produjo en los
tiempos del franquismo.
Entonces éramos más
libres, escribíamos mejor y en las escuelas se estudiaba el idioma castellano
que se ha tornado con lenguaje despectivo en eso que denominan Lengua un término demasiado abstruso y ridículo.
Con él el diablo nos muestra su lengua. Está sucia
y las ministras de Cultura de uno y otro ámbito a la izquierda o la derecha la
Esperanza Aguirre, la Carmen Calvo nos hacían un calvo. Pero qué es eso,
chavalas. ¿Es eso lo que os enseñaron las ursulinas en los colegios de pago a
mostrar el chichi y vender la cultura española por un plato de lentejas?
Desde el año 75 hemos asistido a un lento pero
inquietante proceso de desespañolización. La gentuza no quiero mencionarlos
pues me horroriza su nombre movía los hilos. Con ello nos hemos vuelto más
brutos, más intolerantes, más ladinos.
Existe todo un
programa de cretinización, cuanto más tontos mejo y el que más chifle capador y
nos persiguen a los que aguantamos como si fuésemos ratas.
Nos quieren convertir en mansas ovejas del gran redil
balando por los descampados a merced de lobos en el exterior y de los mastines
y perros de presa en el interior. Puedo atestiguar que la calidad literaria de
las producciones de la era de los demócratas de toda la vidorra pegó un bajón.
Ya no se encuentran autores como Cela, Tomás Salvador, Delibes, Arbó, Ramón
Carnicer etc. Los del 68 generación en la cual me incluyo capitaneados por Jesús Torbado, Umbral, Torrente Ballester y
algún otro fuimos los últimos de filipinas.
Ahora se tiene a
prurito escribir mal con concordancias vizcaínas e incluso con faltas de ortografía.
Echemos un vistazo a nuestros periódicos digitales y a los letreros de texto de
la tv para persuadirnos de que lo que digo no es un error.
Señala Berdiaev que
el nuevo analfabetismo sociológico representa una vuelta a la edad media. A los
tiempos oscuros. Se impone el analfabetismo borreguero.
La oveja que bala y
sigue dócilmente agachando la cabeza los pasos del morueco es más fácil de
gobernar que la arisca. Ya sé que la cabra siempre tira al monte pero esta
gentuza quieren un mundo digital regido por mentes de encefalograma plano.
Quien despunta lo
mandan a las tinieblas exteriores muerte virtual o le envían un dron. Todo saltará
por los aires.
Orgulloso, he de
decir que con mis idas y venidas a la cuesta madrileña de los libros negociando
y aguantando a los libreros de lances no sólo logré sobrevivir sino que también
les hice un corte de manga a estos capullos de la mentira organizada siguiendo
el ejemplo de aquel pasaje del Estebanillo
aquel judío que logró engañar a los judíos de la sinagoga de Niza vendiéndoles
los huesos falsos de un pariente quemado por la inquisición. Jiji jajaja.
Los libros quizá
hogaño no ayuden a triunfar, pero fueron mi adarve, el coselete defensivo con
el cual me guarecí de tanto mamón, de tanto hijo de puta como me encontré en el
camino. He vencido a la hueste diabólica y masónica. Loado sea Jesucristo.
Desde luego no concibo un mundo sin libros, Equivaldría volver a la barbarie.
martes, 5 de marzo de
2024